Planificar es difícil y el 2020 se encargo de demostrarlo de la manera más dura. En mi caso personal me quitó algunas cosas que ya no voy a poder recuperar pero también me dio otras que parecían casi imposibles en su momento.
Estoy profundamente agradecida por haber podido transitar este año en compañía de todos los colegas que leen y participan día a día de esta comunidad, así como de formar parte de grupos de Whatsapp con profesionales increíbles que me motivan todo el tiempo. Sé que el año hubiese sido muchísimo más duro si no hubiesen estado ustedes del otro lado.
Este año decidí empezarlo de manera distinta, enfocándome primero en lo que podría llamarse un manifiesto para encarar este 2021.
Creo que todos tenemos principios rectores en nuestra vida y nuestro trabajo, solo que pocas veces los ponemos por escrito y muchas veces el malestar que sentimos (la falta de sentido en lo que estamos haciendo) es fruto de no tener alineados 3 aspectos fundamentales:
– ¿Quiénes somos? o ¿Quiénes queremos ser?
– ¿Cuáles son nuestras creencias?
– ¿Qué es lo que hacemos? ¿Cuál es nuestro trabajo?
Sé que compartirán algunos de ellos y tal vez no estén de acuerdo con otros o crean que faltan algunos, así que me encantaría leer sus opiniones al respecto.
